Muchos os preguntáis si sois capaces de realizar todas las etapas del Camino, puesto que nunca lo habéis realizado y os come ese miedo a lo desconocido, pero realmente, todos sois capaces, si realizáis un plan de entrenamiento previo.
Si no tenéis la preparación física adecuada, lo que deberás hacer durante al menos un mes de antelación a tu salida, es lo siguiente:
La primera semana, deberás empezar con caminatas de 5-10 km (progresivos) durante 3 días, con el equipamiento que llevaría en el Camino (si tienes planificado contratar un transfer que te lleve el equipaje, con una mochila con agua y algo de comida será suficiente).
En la segunda semana, deberás realizar lo mismo que en la primera, con la diferencia de hacer las caminatas en montaña para ir habituando a tu cuerpo a las pendientes que te puedes encontrar en el Camino.
En la tercera semana, el entrenamiento será el mismo, agregándole una ruta de gran distancia, entre los 20 y 30 km (que se podría realizar los domingos).
Y por último, en la cuarta, sería conveniente seguir con las caminatas por montaña entre 2-3 días y además, tratar de caminar con la mochila el viernes por la tarde y hacer el máximo de km que te permita tu condición física, el sábado lo mismo, y el domingo realizar caminatas equivalentes a las etapas (entre 20 y 30 km) y en terreno montañoso, siguiendo estas pautas llegar a Santiago de Compostela no será un problema.
También es importante mencionar que por más que tengas un fondo físico, no es lo mismo caminar día tras día estas distancias que salir una vez por semana, por lo tanto es importante hacer un seguimiento para que tu cuerpo no se vea resentido.