ETAPA 6: LA MESA – GRANDAS DE SALIME (16’8 km.)

GRÁFICO


ETAPA

DISTANCIA: 16’8 km

ITINERARIO

Corta etapa caracterizada por el largo descenso que lleva al embalse de Grandas de Salime.

Km 0: reanudamos el Camino desde La Mesa por la pista local que vinimos. Afrontamos un desnivel de 150 m., rodeando la peña de los Coriscos, claveteada por una nutrida fila de molinos de viento. Tras el alto descendemos al lugar de Buspol.

Km 2,3: junto a la granja se encuentra la capilla de Santa Marina. Traspasando la cancela posterior comenzamos el largo descenso a la cuenca del Río Navia. Conforme vayamos perdiendo metros, Grandas de Salime irá diluyéndose de nuestra panorámica. Por delante 760 m. de desnivel negativo hasta la misma Presa de Salime. Perdemos altura por la ladera, cubierta de piornos y monte bajo. Cerca de 45 minutos después, desde Buspol, sigue un tramo de falso llano con algunos toboganes por pista forestal. A mano izquierda queda el desvío que se tomaba hace ya años para cruzar el embalse en lancha desde las inmediaciones del anegado pueblo de Salime. 1 km. más adelante, sobre una curva y en la ladera de solana, hay un cortín, un muro circular de piedra que sirve para proteger las colmenas de los osos. Un trecho después pasamos junto a una cruz y 400 m. más adelante, tomamos el desvío a mano izquierda que nos sumerge en un espléndido castañar. Tras varias vueltas y revueltas desembocamos en la AS-14, que seguimos en dirección a la presa. Antes de llegar a ella podemos entrar en la Boca de la Ballena, un mirador colgante que ofrece unas vistas espectaculares de la presa de 128 m. de altura. Acto seguido cruzamos por fin este embalse inaugurado en 1953.

Km 10: la AS-14 va a guiar nuestros pasos durante los próximos 4,5 km. 1 km. más adelante pasaremos junto al Hotel Las Grandas, situado en el lugar de Vistalegre. Dejaremos pasar los kilómetros de asfalto abstraídos por el entorno y, unos 200 m. pasado el desvío a Pénjamo, abandonamos la AS-14 por la izquierda. Una vereda muy empinada da paso a una senda boscosa que lleva hasta Grandas de Salime.

DIFICULTADES

El descenso hacia el embalse de Salime, con más de 7 km. de bajada continua, es un relax para los pulmones pero un martirio para las piernas.